Restaurante gourmet, comida gourmet, lounge gourmet, libro gourmet, experiencia gastronómica, nueva gastronomía… La gastronomía ha invadido el ámbito mediático. Se pone a todas las salsas, si se me permite decirlo, y muy a menudo se usa en exceso. Pero, ¿cómo definir la gastronomía?
Si vamos a creer en el Larousse, la palabra gastronomía proviene del griego gastronomia que literalmente significa la ley, la regla del vientre. Pero en los griegos gastronomia y gastrologia significan lo mismo y se refieren a un libro de Arkhestratos, “Gastrologia ” que se traduce en el Bailly: Traite de la Gourmandise o Traite des Gourmands. ¡Bigre! Digamos más bien tratado del buen Chère. Sobre esta obra sólo cabe conjeturar de la que no queda más que una cita de Athénée en “El banquete de los sofistas”.
Esta palabra cayó en el olvido durante varios siglos hasta que Joseph de Berchoux la exhumó en un poema de 4 canciones titulado “El gastrónomo o el hombre del campo en la mesa” que publicó en 1800. Lyrique J. Berchoux persiguió un objetivo burlándose de la musa:
“Canto el hombre en la mesa, y diré la manera
Para embellecer una comida, contaré el secreto
Para aumentar los placeres de un banquete agradable
Para fijar la amistad allí, para disfrutarla sin fin…
… Y ser irrazonable en una dulce intoxicación.
¿Debemos señalar, entre Arkhestrate y Berchoux, Rabelais y sus gastrolâtres?
De todo ello, recordaremos, por tanto, que la gastronomía es el arte de cocinar, de complacer los platos.
Y llegó Brillat-Savarin
1826: publicación de Physiologie du Goût de Brillat-Savarin, que es una obra sobre gastronomía. En medio de charlas y sofismas, encontramos algunas perlas bastante interesantes, incluso en Meditación III, una definición de gastronomía.
“La gastronomía es el conocimiento razonado de todo lo que tiene que ver con el hombre, en la medida en que se come a sí mismo como el
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Su finalidad es asegurar la conservación del hombre mediante la mejor alimentación posible. ”
Esto tiene el mérito de ser claro y que amplía la primera definición. Además del arte de cocinar, hay que sumar todo lo que tenga que ver con la comida y el acto de comer. Por tanto, la gastronomía forma parte de la historia y la historia de los hombres.
La gastronomía es, por tanto, un tema vasto
De hecho, la gastronomía ha participado en la evolución de la humanidad, ya que le ha permitido mantener una buena salud y progresar. El hombre necesita alimentarse para vivir, entonces encontrará los medios para obtener su alimento e inventará la cría y el cultivo de plantas, y los criadores y agricultores crearon las herramientas necesarias para cultivar.
Entonces los hombres desarrollarán sistemas de distribución de estos alimentos: los mercados, e importarán y exportarán nuevos productos que se descubren en otros lugares y que se vuelven imprescindibles para cocinar.
El hombre también inventará la cocina: recetas, utensilios para hacerlas, un arte culinario, una profesión, la de cocinero.
El arte culinario dará lugar a las artes de la mesa: cubiertos, platos, vasos, platos, mesas, manteles y servilletas.
Para las comidas más prestigiosas, imaginará el servicio de la mesa. El arte de servir en la mesa, traer comida, servir vino, cortar carne, pajes, mayordomos y escuderos afilados que se convertirán en camareros, sumilleres y gerentes de hotel. Para comer y beber fuera de casa se crearán tabernas, cabarets, caldos, cafés, restaurantes, bistrós, brasseries, etc.